Bueno y bonito o simplemente bonbonite, fue la motivación de la pareja fundadora de esta marca para iniciar lo que hoy es un fuerte y hermoso negocio familiar que cuenta con más de 30 tiendas alrededor de Medellín, Bogotá, Barranquilla y Villavicencio. Cuando los dueños se acercaron al estudio para hablar sobre sus sueños y por qué era el momento de hacer una nueva estrategia, sentí una inmensa alegría (siempre soñé con este tipo de cliente: ¡zapatos!) y por supuesto una gran responsabilidad. Empezamos haciendo una investigación amplia en la que viajamos, leímos y por cierto, vimos una cantidad inimaginable de zapatos y carteras, solo para comenzar a entender (y esto fue una sorpresa muy agradable para mí) que los zapatos no son solo un producto femenino, sino que son, cuentan y hacen parte de la historia de la mujer. Luego de aprobar la estrategia de comunicación, desarrollamos un sistema visual basado principalmente en las formas y el estilo de las letras del logo que volvimos a dibujar con la ayuda de la leterista Marianna Rezk. Estas formas las empezamos a aplicar en las diferentes piezas de la marca que van desde los empaques y la comunicación digital; hasta forros de carteras y suelas de zapatos.